Regresar de las vacaciones a la rutina no es un alivio para la gran mayoría de personas. Y es que no todos tienen la capacidad de reincorporarse en el trabajo y el hogar con gran facilidad. Según la Clínica de la Universidad de Navarra, en España, el síndrome post vacacional es un proceso que se ha generado en los últimos tiempos como parte del estilo de vida moderno, y que se refiere a la dificultad de adaptarse a la actividades diarios.
Si bien el síndrome post vacacional no se cataloga como una enfermedad, este afecta al bienestar de una persona de manera emocional y social. ¿A qué nos referimos? Cuando se rompe el tiempo de ocio de una persona se genera cansancio, fatiga, dolores musculares, falta de apetito y de concentración, entre otros problemas. Para evitar molestias de este tipo, hemos preparado seis consejos para reincorporarte a la rutina sin problemas.
1. Planea los días:
Un error que cometen muchas personas es regresar al trabajo al día siguiente del fin de sus vacaciones. Si te vas de viaje, tómate -al menos- un par de días para incorporarte de forma gradual a la rutina.
2. Trabaja en la oficina:
Disfruta de tu tiempo libre, e intenta no llevar trabajo a casa para poder distraerte cuando salgas de la oficina. La idea es que no te incorpores al trabajo de manera radical y te pongas al día en tus responsabilidades sin perder la cabeza.
3. Cuida tu reloj interno:
Las vacaciones son totalmente opuestas a la rutina en todos los sentidos. Por ello, es importante que tu cuerpo se readapte de las siguientes maneras: estableciendo horarios para dormir y comer. Tu nuevo ‘reloj interno’ irá adaptándose al nuevo cambio en el transcurso de los días.
4. Organiza tus días:
Al regresar de vacaciones podría parecer que tuvieras una lista inmensa de tareas pendientes por realizar. Lo ideal es que te pongas metas cortas y realistas para cumplir, y las escribas en una agenda para no olvidarlas. Con el paso de los días te darás cuenta que no era tan difícil.
5. Disfruta la vida:
Recibe tu retorno con humor y aprovecha el tiempo libre para recordar todas las cosas buenas que tienes en tu hogar y tu vida. ¿Un consejo? Sal con tu familia y amigos para disfrutar tu ciudad.
6. Planea nuevos viajes:
No te deprimas pensando en el fin de tus vacaciones y, apenas tengas tiempo, empieza a planear las próximas. La vida está hecha de inicios y solo tú puedes escribir el siguiente.
¿Qué opinas?